Si vives en una comunidad de vecinos, seguro que conoces la importancia de contar con un buen seguro de comunidad.
Hay que saber diferenciar entre un seguro de comunidad y un seguro de hogar. Mientras el seguro de hogar se encarga de cubrir la casa y pertenencias de cada propietario, el seguro de comunidad cubre las zonas comunes (rellanos, portal…).
En muchas ocasiones, hay grandes disputas porque no todos los vecinos están dispuestos a pagar un precio elevado por una póliza de seguro de comunidad, mientras que otros prefieren pagar y estar tranquilos ante cualquier problema que pueda surgir.
Lo ideal es, llegar a un acuerdo, y contratar una póliza de seguro básico, con un precio adaptado al bolsillo de todos los vecinos.
¿Qué coberturas debe tener un seguro de comunidad?
Aunque esto dependerá de las preferencias de sus propietarios, cabe decir que, el problema más habitual en los edificios son las filtraciones de agua o roturas de las canalizaciones comunes.
Por ello, entre las principales coberturas del seguro de comunidad se deben incluir las goteras. También una buena cobertura de cristales, porque la rotura de los cristales en zonas comunes es muy frecuente. Y por supuesto, la responsabilidad civil y la defensa jurídica.
Aunque aquí hemos mencionado las coberturas principales, es conveniente comentar que, los seguros de comunidades de propietarios deben estar contratados para responder a:
- Robo y desperfectos en zonas comunes.
- Daños eléctricos.
- Roturas y desperfectos por lluvias, vientos…
- Defensa jurídica y asistencia.
- Garantías extras para propietarios de edificios.
Para los más exigentes, recomendamos incluir entre sus coberturas otros aspectos, como son:
- Control de plagas.
- Rotura de maquinaria.
- Vehículos en garaje.
- Servicio de vigilancia.
- Daños por goteras.
- Limpieza de grafitis.
- Accidentes de empleados.
Como ves, el seguro de comunidad puede ofrecer un amplio abanico de coberturas, que siempre dependerá de lo que el cliente necesite.